EDUCACIÓN

Hoy hablaremos de educación, en este programa. Educación cómo es o cómo debiera ser. Educación como el alfarero absorto dando forma a la arcilla moldeable en su torno, o educación como retahíla tediosa, impertérrita y estática a la que nos tienen acostumbrados.
No he encontrado todavía términos medios. Me resulta curioso como puedo separar a todos los que han intentado enseñarme entre aquellos que no supieron ser más que un conglomerado de minutos de hastío frente a un proyector o simplemente libros parlantes que justifican horas. De ellos no aprendí nada, tal vez por lo que señalaba Horace Man:
"El maestro que intenta enseñar sin inspirar en el alumno el deseo de aprender está tratando de forjar un hierro frío".

Pero también tuve la suerte de conocer a aquellos otros que despertaron mi atención, que me envolvieron de dudas entregando lo mejor de sí mismos, y de los que siempre guardaré sus cicatrices. Aquellos que como advirtió Ortega y Gasset,
"Siempre que enseñaban, enseñaban a la vez a dudar de lo que enseñaban".

Mark Twain dijo en una ocasión:
"Nunca he permitido que la escuela entorpeciese mi educación"
Tal vez debió estudiar en España. La clase política como siempre más preocupada por el tapizado de su cómodo sillón y aprovechándose del oportunismo, no ha solucionado los problemas educativos en nuestro país. De Logse a LOCE, de Loce a LOE, que es lo mismo siempre, pero con distintas siglas, solo que la portada del proyecto a veces es roja y a veces azul.
Los de siempre, nos han hecho aprender que "nación" es un término discutido y discutible, pero se han olvidado de los que indicó Inmanuel Kant:
"Tan solo por la educación puede el hombre llegar a ser hombre. El hombre no es más que lo que la educación hace de él".

Probablemente conzcan la cita del escritor Herbert Spencer que dijo que "El objeto de la educación es formar seres aptos para gobernarse a sí mismos, y no para se gobernados por los demás".
Por suerte una buena educación no conoce límites legales, no cede a presiones de uno u otro color, porque fluye sin filtros. Y es que como señaló Howard Hendricks:
"La enseñanza que deja huella no es la que se hace de cabeza a cabeza, sino de corazón a corazón".
He tenido la suerte de conocer grandes educadores, algunos sé que me están escuchando, ellos "con los años, me enseñaron muchas cosas que los días jamás llegan a conocer" como narraba Ralph Emerson.
A ellos siempre les estaré agredecido, pues soy en parte algo que ellos me dieron, supieron que
"la educación ayuda a la persona a aprender a ser lo que es capaz de ser" como dijo el poeta Hesiodo.
Tal vez nos convenga repasar a todos, porque en la vida todos alguna vez somos ejemplo para alguien, las palabras de Benjamin Franklin:
"Dime y lo olvido, enséñame y lo recuerdo, involúcrame y lo aprendo".

Debemos involucrarnos si queremos aprender, si no queremos que se cometan abusos, si no queremos que desde el poder se eduque a la ciudadanía.
Quisiera despedirme con esta reflexión del escritor británico John Ruskin:
"Educar a un niño no es hacerle aprender algo que no sabía, sino hacer de él alguien que no existía"
No tardemos en empezar.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Bien hizo Mark Twain al no dejar que entorpeciesen su educación,ya que en la sociedad actual,pese a quien pese ,la educación esta destinada a encadenar a la masa social en vez de atender a su principal cometido: crear personas libres y dependientes de si mismas. Esto sucede cuando un grupo quiere hacer creer a golpe de ley a la ciudadania que sus ideas son mejores que las de los demás, ya sean de un color u otro,y, gracias a este egoísmo, el cual parece no va ser neutralizado en la clase política a corto plazo, seguiremos teniendo uno de los peores sistemas educativos de Europa.Pero como lo que realmente importa es el poder, el mejor medio para manejar a su antojo a la persona, por desgracia, es la educación.